Desde niña ha tenido un gusto especial por las artes plásticas, debido a que con sus abuelos disfrutaba de hacer algunas actividades que le permitían experimentar con tejidos, texturas, color y de esa manera fue generando actividades que la alegraban y llenaban su alma como el hilado, tejido, cardado y el dibujo, actividad con la que obtuve su primer premio a los 7 años. Luego en el colegio fue reforzado ese gusto por sus maestros y hoy sigue actualizando sus conocimientos, ya que el arte fue y seguirá siendo siempre un área de su prioridad. Así describe la pintora Ana Lucélida Torres sus primeras incursiones en el arte.

Aclara que sus objetivos son: crear obras pictóricas con el fin de manifestarse al mundo, la presencia de una mina de Sal con una hermosa Catedral en su interior, como muestra de la cultura Católica y con espacio para acoger a propios y extranjeros que nos quieran visitar. Mostrarle al mundo el tesoro escondido de la Montaña Muisca, que a través de la explotación técnica y majestuosa de socavones de Sal en el interior de la montaña y promover nuestra riqueza cultural por medio de obras pictóricas exclusivas y modernas, presentándole al mundo la nueva forma de observar una cultura tan poderosa y completa como la cultura muisca.

Se describe como mujer profundamente enamorada de los saberes artesanales y artísticos, aclara que inició sus labores con la creación de una asociación de productos artesanales con el fin de darle una mejor calidad a los souvenir que se vendían en Catedral de Sal, de ahí nació la idea de tallar un muro y con el docente de talla en Sal se llevó a cabo ese proyecto en donde participan 20 talladores escultores, “luego motivada por seguir creciendo realizó estudios en el Sena como Técnico en armado de piezas de joyería y allí mismo otras especialidades, las cuales la llevaron a participar en el proceso transformando el brillo, dicho trabajo con apoyo del Sena, la Universidad de Birmingham Inglaterra y el museo del Oro”.

Comenta que desde ahí se especializó en trabajar sobre la cultura muisca y diseñar joyas inspiradas en dicha cultura con las cuales adquirí varios premios y nominaciones. “Luego continuando con una labor creciente he decidido seguir vinculada con El Centro Cultural de Cajicá, en donde he recibido asesoría de calidad y sigo participando de varios programas. La idea de plasmar la belleza de Catedral de Sal para mostrarle al mundo de una manera especial nuestro hermoso”, detalla.

Asegura que está madurando un proyecto que ha expuesto en Catedral de Sal y en Corferías (Feria del Libro), en donde ha vendido algunos originales y la ha motivado para seguir formándose y continuar el proyecto.

Sus Exposiciones: